La crisis climática acelera el deshielo en la Cordillera Blanca y expone nuevas amenazas. La ingeniería ambiental busca respuestas frente a este riesgo creciente.
Las lagunas glaciares de la Cordillera Blanca, como Palcacocha, Vallunaraju y Shallap, han dejado de ser solo postales turísticas. Hoy, su creciente volumen de agua y los efectos del cambio climático las convierten en una amenaza silenciosa pero real para miles de personas que viven en zonas vulnerables.
De acuerdo con el más reciente informe del Instituto Nacional de Investigación en Glaciares y Ecosistemas de Montaña (Inaigem), publicado en mayo de 2025, 58 lagunas glaciares en el Perú han sido clasificadas como de riesgo muy alto. La más crítica es Palcacocha, cuya capacidad actual supera los 17 millones de metros cúbicos de agua. En caso de desborde repentino, los efectos serían devastadores para la ciudad de Huaraz, tal como ocurrió en 1941, cuando un evento similar dejó más de 1?800 personas fallecidas.
Pero el peligro no es solo físico. Estudios recientes revelan que estas aguas también están sufriendo procesos de contaminación por metales pesados como el arsénico, producto del deshielo glaciar y del drenaje ácido de rocas. El río Shallap, por ejemplo, registra niveles que superan los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud para consumo humano.
Para conocer más a fondo este fenómeno, conversamos con la Ph.D. Flor Ángela Jara Remigio, docente de la Escuela Profesional de Ingeniería CIvil de la Universidad César Vallejo, especialista en recursos hídricos y con amplia experiencia en temas de gestión de cuencas altoandinas.
¿Cuál es el principal riesgo que enfrentan las lagunas como Palcacocha hoy en día?
El principal riesgo que enfrentan las lagunas glaciares, no solo Palcacocha, es a desbordes debido a eventos de deshielo acelerado que en los últimos años se ha intensificado por el retroceso de los glaciares. Esto provoca que las lagunas aumenten en tamaño y volumen, lo que incrementa la probabilidad de los desbordes.
¿Qué factores están acelerando este fenómeno?
El cambio climático es el principal factor que acelera el retroceso glaciar y el aumento del volumen de las lagunas glaciares. Asimismo, el aumento de la temperatura provoca un derretimiento acelerado de los glaciares de la Cordillera Blanca, contribuyendo a la formación y el aumento de las lagunas glaciares.
Por otro lado, los factores humanos como la deforestación y la intervención en el paisaje también alteran los procesos naturales, generando mayor sedimentación y cambios en la dinámica de las cuencas.
¿Qué impactos ecológicos y sociales se están generando ya?
La contaminación de las lagunas y la sedimentación acelerada afectan la biodiversidad acuática y terrestre de la zona. La calidad del agua se ve comprometida por contaminantes derivados de actividades humanas, afectando los ecosistemas y la fauna local.
¿Qué acciones se están tomando desde la ingeniería ambiental?
Se deben implementar diversas iniciativas para monitorear y mitigar estos riesgos, por ejemplo, realizar estudios de modelamiento hidrológico y glaciológico para prever posibles eventos de desborde. Del mismo modo, definir las zonas más vulnerables, las zonas en riesgo. A su vez, la educación ambiental, promoviendo la sensibilización de las comunidades y fomentando acciones para reducir la contaminación.
¿Qué mensaje le daría a los futuros ingenieros ambientales del país?
A los futuros ingenieros los invito a ser actores activos en la protección de nuestros recursos hídricos. La problemática de las lagunas glaciares en Huaraz es un ejemplo claro de cómo el cambio climático, unido a la intervención humana, requiere soluciones innovadoras y sostenibles. Por ello, les invito a comprometerse, a seguir aprendiendo y a trabajar con pasión y responsabilidad para afrontar los desafíos ambientales que nuestro país enfrenta.
¿Qué podemos hacer como ciudadanos?
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Informarnos sobre el riesgo de nuestras fuentes hídricas.
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Exigir planes de prevención y adaptación a las autoridades.
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Reducir nuestra huella de carbono mediante hábitos sostenibles.
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Participar en acciones de educación ambiental desde nuestras comunidades.
UCV: compromiso con la sostenibilidad
Desde la Universidad César Vallejo, reafirmamos el compromiso con la formación de profesionales capaces de enfrentar los retos más urgentes del país. Nuestra Escuela de Ingeniería Ambiental impulsa investigaciones aplicadas, actividades de monitoreo y propuestas de remediación ambiental en zonas de riesgo como la región Áncash.
La ciencia y la educación son nuestras mejores herramientas para proteger el agua, la vida y el futuro.
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