A poco de celebrar el Día Internacional del Trabajo, es importante que reconozcamos la lucha de los mártires de Chicago, aquella gesta de un grupo de sindicalistas en un lejano 1886. Pero también, la lucha de los héroes sin capa que se enfrentaron a la COVID-19.
Han transcurrido más de dos años de pandemia y las formas de trabajo han cambiado. Empleadores y colaboradores han tenido que adaptar nuevas medidas para seguir realizando sus funciones y, en este 2022, se presentan las labores híbridas como tendencia. ¿Cómo influye esto en la productividad? ¿La flexibilidad laboral debe ser una prioridad?
Las empresas enfrentan desafíos para diseñar modelos de trabajo que se adapten al entorno y encontrar nuevas formas de capacitar a los colaboradores para estar preparados frente a los cambios que puedan surgir. Lograr lo anterior permitirá que las compañías se conviertan en organizaciones abiertas a la flexibilidad y las tendencias emergentes. El 72 % de las empresas ha cambiado y mejorado su cultura conforme se adaptan a la nueva normalidad, al brindar mayor flexibilidad a los colaboradores en cuanto a dónde y cuándo trabajan.
Repensar el espacio físico de trabajo para convertirlo en un escenario de socialización e integración en el que se implementan las tecnologías y los beneficios que tiene un modelo híbrido sobre la productividad y el desempeño ha generado un impacto positivo en la experiencia de los colaboradores y las empresas.
No es un secreto que la virtualidad implicó que el personal de diferentes empresas tenga que adaptarse a una nueva realidad, pero del mismo modo, aspectos de la presencialidad se extrañan; por ejemplo, los espacios adecuados para cumplir funciones específicas; ya que gran parte de la gente no tiene un buen lugar para trabajar desde casa. Por ende, la tendencia del trabajo híbrido con alguna proporción presencial, pero no al 100%, es una opción para el funcionamiento de los equipos de trabajo.
Así lo confirma Juan Luis Martín, director de recursos humanos de Prosegur, con 150 000 empleados en 26 países: “No podemos perpetuar el trabajo por Zoom y Teams, pero tampoco volver a la presencialidad al 100%, el trabajo híbrido ha surgido como opción”. Así mismo, el reclutamiento de personal en cualquier lugar. Esta será también una de las derivadas del modelo híbrido. “Hay que buscar el talento allá donde esté y que se le mida en función de objetivos”, agrega Martín.
En definitiva, debido a la implementación del trabajo híbrido, se están utilizando con mayor frecuencia las tecnologías de la información y comunicación para potenciar la productividad; para ello se deben reestructurar los modelos laborales hacia nuevas prácticas enfocadas en la incorporación de una mayor flexibilidad, además de ampliar las herramientas para extender las capacidades y habilidades de los colaboradores.
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